¿Has escuchado hablar del IMC? Si no lo has hecho, ¡no es gran cosa! Cariño, la mayoría de los niños de tu edad no conocen esas cosas. Pero el IMC es realmente importante porque puedes hacer cosas que te ayuden a vivir. y cuidar de tu salud para que TRADE SURFICIENTES dada la ilusión si este cuerpo TE PROPORCIONE mejor
IMC: Índice de Masa Corporal. Este es un número único que nos indica si tu peso corresponde a la altura que tienes. Cada cuerpo es único y ¡eso es genial! Podrías enfermarte si eres demasiado grueso o pesado en comparación con tu altura. Y a medida que las personas engordan, lo hacen de manera poco saludable, poniéndose en el camino hacia la diabetes, las enfermedades cardíacas y la hipertensión. Estos son todos problemas reales, ¡y no debemos sufrirlos! Por otro lado, si tu peso es demasiado bajo en relación con tu altura, también puede presentar problemas de salud. Esto podría llevar a enfermar con más frecuencia, sentirse fatigado o demasiado cansado para salir y jugar.
El IMC puede decirte si los alimentos que comes y tu nivel de ejercicio diario están en buenas proporciones. Así que si descubres que tu IMC es demasiado alto, tal vez reducir los refrescos azucarados (soda) y la comida rápida (papas fritas y dulces). En su lugar, asegúrate de comer frutas y verduras saludables. ¡Ellas son una rica fuente de vitaminas y minerales que proporcionan los nutrientes que necesita tu cuerpo! Además, podrías moverte más. Esto puede incluir jugar afuera, montar en bicicleta, nadar o participar en un equipo deportivo divertido. Mantenerse en forma y sentirse bien es posible con un poco de ejercicio.
Además, si tu IMC es demasiado bajo, es igual de importante corregirlo. Solo intenta comer más de los alimentos que sabes que son saludables y te ayudarán a fortalecer tu cuerpo. Las nueces, los lácteos, los granos enteros y las carnes magras pueden ayudarte. También podrías preguntarle a tus padres o a tu médico qué tipo de ejercicios puedes hacer para ganar algo de músculo y alcanzar un peso saludable antes del próximo chequeo médico.
Esto implicará un poco de matemáticas para determinar tu IMC. Esta es una calculación donde divides tu peso, en kilogramos, por el cuadrado de tu altura, en metros. Así que, multiplicas tu altura por sí misma y luego lo divides entre el peso. ¡Pero no temas, no es difícil de entender! Hay muchas calculadoras en línea que lo harán por ti. Sin embargo, tu médico o enfermera escolar también pueden hacer este tipo de cálculos por ti. Recuerda, ¡ellos están ahí para ayudarte!
Estás cuidando de tu cuerpo simplemente al tener un IMC en el rango de "saludable". Si cae en la categoría de "sobrepeso" o "obeso", comunicarte con un médico/nutricionista podría ser beneficioso para aprender cómo puedes volverte más saludable y tener más energía. Si está en el rango de "bajo peso", entonces también deberías hablar con tu médico sobre cómo te pueden guiar para ganar peso de manera efectiva y saludable.
Tu salud y felicidad son vitales, y seguir haciendo buenas elecciones de alimentos te mantendrá en un peso saludable. Así que, conocer tu IMC es una manera de alcanzar ese objetivo. Recuerda: El peso en la báscula no lo es todo. Comer una dieta equilibrada —una que sea rica en todos los nutrientes que tu cuerpo necesita para mantenerse en forma, fuerte y saludable— combinada con mucho ejercicio regular, así como cantidades adecuadas de sueño, son esenciales para prevenir la obesidad con el tiempo.