La composición corporal es simplemente una manera de examinar el estado actual de lo que nuestros cuerpos están hechos. Estos componentes abarcan huesos, órganos, tejidos musculares y grasas. Cuanto más conscientes seamos composición corporal por bioimpedancia más predispuestos estaremos no solo a saber qué tan saludables estamos funcionando, sino también en qué lugar nos situamos en cuanto a la forma física. Nuestro cuerpo funciona como una máquina, al igual que necesitamos cuidar bien las máquinas para su correcto funcionamiento, nuestros cuerpos también necesitan protección y cuidado frente a diversos problemas de salud. Nuestra primera responsabilidad con nuestra salud debería ser entender nuestra composición corporal.
La composición corporal es simplemente músculo, hueso y grasa saludables. Necesitamos este equilibrio para nuestra salud y para prevenir enfermedades. Este problema puede variar desde problemas de peso, problemas de salud cardiovascular además de diabetes. Por no mencionar que cuando tenemos una composición corporal adecuada, moverse es divertido y parte de nuestras actividades diarias. Nos ayuda a envejecer con bienestar y sentirnos bien. Mantener una composición corporal óptima es tan importante para nuestra cordura como lo es para mantenernos sanos. Sentirnos bien con nuestros cuerpos puede hacernos sentir más felices en general.
Todo esto puede afectar cómo y dónde nuestro cuerpo almacena grasa. Un factor importante son los genes. Es decir, recibimos ciertas características y comportamientos de nuestros padres que pueden determinar la manera en que funcionarán nuestros cuerpos físicamente. Cuando heredamos estas características, puede tener un gran impacto en la cantidad de músculo o tejido graso con la que terminas. Nuestra dieta también juega un papel esencial. Todo esto sirve para mantenerse saludable. bia para la composición corporal en control (requiere comida). Comer frutas y verduras es esencial. Actividad: Otro Elemento Clave. El ejercicio regular ayuda a nuestros cuerpos a construir músculo y quemar grasa. Esto es esencial para mantener una composición corporal favorable.
Algunos mecanismos que podemos emplear para cambiar nuestra composición corporal. Una forma fácil es comer bien. Incluye no solo frutas y verduras, sino también muchos granos enteros, proteínas magras como frijoles y pescado, y grasas saludables como el aguacate. Una cosa más: los alimentos procesados y las bebidas azucaradas no son buenos para ti. Además de ser una parte clave de una buena salud, al fin y al cabo. Hacer ejercicio regularmente con actividades como trotar, nadar o incluso participar en algunos deportes nos ayuda a tonificar nuestro cuerpo y perder grasa. Mover nuestro cuerpo y ejercitarnos regularmente es bueno por al menos 30 minutos al día, cinco días a la semana.
Tenemos varios enfoques para medir y monitorear nuestra composición corporal. El Índice de Masa Corporal (IMC) es una de las formas más comunes. El IMC se mide en proporción a la altura y el peso de una persona. Este cálculo nos indica si alguien está bajo peso, peso normal, sobrepeso u obesidad. Sin embargo, hay que tener en cuenta que el IMC no considera otras variables importantes: la masa muscular magra, la densidad ósea ni el porcentaje de grasa corporal.
El porcentaje de grasa corporal es otro método para evaluar la composición corporal. Para estas mediciones de grasa corporal se utilizan calibradores o análisis de impedancia bioeléctrica (BIA). Estos métodos pueden ser útiles para proporcionar una medición completa y precisa de nuestra composición corporal. Es una buena costumbre revisar nuestra composición corporal de vez en cuando. Así nos ayuda a monitorear nuestro progreso y cambiar cualquier tipo de alimentos que podamos incluir o si los ejercicios que estamos haciendo nos funcionarán.